Haz clic aquí para modificar.
La historia del molinillo de café debería haber evolucionado paralelamente a la del café que se cree que surgió en Arabia en el siglo XII según excavaciones arqueológicas.
Pero es a partir de 1750 que se conocen los primeros rudimentarios molinillos de café. Fabricados en hierro artesanalmente con intención estética.
En 1870 se introdujo la madera noble, con decoración artística
La producción en serie de los molinillos de café se inició a mediados del siglo XIX liderada por los hermanos Peugeot. Fue a finales de este periodo y coincidiendo con la Revolución industrial cuando empezaron a surgir infinitas variedades de esta máquina.
Era indispensable para triturar los granos aromáticos y morenos que llegaban de los puertos de África y Sudamérica.
Pese al origen fabril, los molinillos lucían un aspecto artesanal, los trabajaban hasta conseguir un acabado de ingenua y romántica belleza. Luego fueron pasando de abuelos a padres, de padres a hijos.
Actualmente la técnica ha creado distintos modelos avanzados tecnológicamente, con el uso de la electricidad, pero sin poder superar ese delicioso sabor estético que caracteriza a los molinillos "de antes", esos encantadores objetos antiguos útiles que se han ido convirtiendo en piezas de colección por sus cualidades decorativas.
Pero es a partir de 1750 que se conocen los primeros rudimentarios molinillos de café. Fabricados en hierro artesanalmente con intención estética.
En 1870 se introdujo la madera noble, con decoración artística
La producción en serie de los molinillos de café se inició a mediados del siglo XIX liderada por los hermanos Peugeot. Fue a finales de este periodo y coincidiendo con la Revolución industrial cuando empezaron a surgir infinitas variedades de esta máquina.
Era indispensable para triturar los granos aromáticos y morenos que llegaban de los puertos de África y Sudamérica.
Pese al origen fabril, los molinillos lucían un aspecto artesanal, los trabajaban hasta conseguir un acabado de ingenua y romántica belleza. Luego fueron pasando de abuelos a padres, de padres a hijos.
Actualmente la técnica ha creado distintos modelos avanzados tecnológicamente, con el uso de la electricidad, pero sin poder superar ese delicioso sabor estético que caracteriza a los molinillos "de antes", esos encantadores objetos antiguos útiles que se han ido convirtiendo en piezas de colección por sus cualidades decorativas.